San Marcos es el corazón palpitante del turismo veneciano, y es aquí donde se encuentran las principales atracciones. Después de visitar San Marcos, vaya al barrio de Castello, el más grande de Venecia, con muchas atracciones ocultas que sólo conocen los lugareños. El corazón de San Marcos es, sin duda, la Plaza de San Marcos con la Basílica, el Campanile y el Palacio Ducal. Estas tres atracciones llenarán medio día. Visitar la plaza será como entrar en un sueño. Una vez que haya terminado de hacer turismo y haya disfrutado de un café en los cafés Quadro o Florian, tómese una foto de recuerdo de la Columna de San Marcos con la laguna como telón de fondo. Allí, en el muelle de la laguna, busque a un amable gondolero, obtenga una sugerencia de ruta, regatee el precio y luego disfrute de un paseo en góndola. Un paseo en góndola es imprescindible si visita Venecia y le sobra tiempo. Una vez de vuelta en la Plaza de San Marcos, diríjase al Puente de los Suspiros para tomar algunas fotos de recuerdo. Desde allí, recorra la romántica Riva degli Schiavoni con sus magníficos paisajes de laguna. Después del Río de la Pleta, cruce el Puente del Sepolcro y busque el Sotoportego dei Preti con su querido corazón de ladrillo. Deténgase aquí y busque un restaurante donde pueda comer algo típicamente veneciano, habrá muchas opciones. Tras el almuerzo, quizás pueda pasear por el Campo della Bragora, cruzar el Ponte Storto y hacerse una foto de recuerdo en el Ponte del Purgatorio, un homenaje al poeta Dante Alighieri. A pocos pasos se encuentra el Arsenale di Venezia, en el corazón del barrio de Castello. El Arsenale era una fábrica de barcos conocida hasta en los lejanos puertos de Oriente. Hoy en día, el Arsenale no sólo es una atracción turística, sino también la sede de la Bienal de Venecia. Desde allí, tome un vaporetto desde el Arsenale y bájese en una de las dos paradas Giardini o Giardini Biennale, ¡siempre es bueno subirse a un vaporetto! Una vez bajado del vaporetto, pasee por los jardines creados por Napoleón, que ahora albergan los 29 pabellones de exposición de los distintos países. Vuelve a coger un vaporetto, bájate cerca de la Plaza de San Marcos y con la ayuda de nuestro mapa busca un bacaro donde puedas comer y beber algo. Si es un amante de los barcos, le sugerimos que visite el Museo de Historia Naval de Venecia, un destino casi obligatorio si le gustan los barcos. |