Zioba Grasso

El punto álgido de las celebraciones de Carnaval se celebra tradicionalmente el último jueves, llamado Zioba (jueves gordo). Aún hoy, además de la emoción del Mardi Gras, el día de cierre de las dos semanas de carnaval, es el jueves cuando tienen lugar los mayores eventos teatrales y las fiestas.

Zioba Grasso se remonta a la victoria del dux Vitale Michieli II sobre Ulrico, el patriarca de Aquileia.

En 1162, la Serenísima hizo prisionero a Ulrico junto con 12 párrocos aliados de los señores feudales friulanos. Estos eran los conspiradores de una rebelión por el control de las salinas de Grado. El patriarca de Grado, Enrico Dandolo, tuvo que huir a Venecia. El cautiverio de Ulrich terminó cuando prometió pagar un tributo anual a Venecia de 12 panes, 12 cerdos y 1 toro.

Zioba Grasso ("el día de la caza") se convirtió en el aniversario de esta victoria, que se celebró en la plaza de San Marcos durante muchos años. En las celebraciones se sacrificaban un toro (que simbolizaba a Ulrico) y 12 cerdos (los 12 párrocos) para la gloria de Venecia.

Se convirtió en costumbre dar un trozo de carne a cada senador de la República y repartir pan a los prisioneros. La victoria sobre los señores feudales friulanos y Ulrico también se conmemoró en Zioba Grasso, en la Sala del Piovego del Palacio Ducal. Allí, el Dux y los senadores golpearon los castillos de madera con barras de hierro simbolizando la victoria sobre los señores feudales.

 Para alegría de Venecia, la fiesta y el tributo celebrados allí continuaron incluso después del declive del Patriarcado de Aquilea. Con la prohibición de la matanza de cerdos y toros, las celebraciones se hicieron menos sangrientas.

Desde el siglo XVI hasta la caída de la Serenísima en 1797, la Zioba Grasso se celebraba en la plaza de San Marcos, en presencia del Dux y otros dignatarios. Allí, una máquina de madera con forma de torre cuadrada lanzaba fuegos artificiales. El espectáculo favorito entonces era un acróbata que bajaba por una cuerda desde el campanario de San Marcos hasta la plaza. Muchos murieron intentando realizar estas hazañas.

Entre los venecianos era muy popular el juego "El poder de Hércules". En este juego, las dos facciones principales en las que se dividía el pueblo veneciano, Castellani y Nicolotti, se desafiaban mutuamente. Cada facción crea una extraordinaria pirámide humana, ya sea en barcazas sobre el agua o en tierra. Los gritos y aplausos del pueblo determinan la facción ganadora. Otro acontecimiento que tiene lugar antes de los fuegos artificiales es el Moresco, la danza militar de los "arsenalotti" (trabajadores del Arsenal).