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Museo de Historia Natural

El Museo de Historia Natural Giancarlo Ligabue de Venecia se encuentra en el majestuoso Fondaco dei Turchi desde 1923. El museo lleva el nombre del paleontólogo veneciano Giancarlo Ligabue. La exposición incluye una variada colección científica y un laboratorio de investigación con un personal que a menudo trata de promover la participación de los venecianos.

La mayor parte de la colección se refiere a la zona de la laguna. Hay numerosas colecciones zoológicas, como la de insectos, aves y moluscos. En el ámbito botánico, el museo cuenta con herbarios, algares y una gran colección de setas.

La colección cuenta con más de 2.000 piezas recogidas a lo largo del tiempo, gracias también al gran legado del Museo Correr y del Instituto de Ciencias, Literatura y Artes del Véneto.

En el museo también hay un laboratorio y una biblioteca que pueden utilizarse para investigaciones y disertaciones.

La colección permanente está organizada de forma original y atractiva, lo que hace que su visita sea una experiencia adecuada incluso para los niños. Una de las atracciones más populares es el acuario Tegnue. Este acuario reconstruye el entorno submarino del mar Adriático y tiene 5 metros de longitud, con 5.000 litros de agua y casi 50 especies de peces. Impresionante es la Galería de los Cetáceos y la Sala de los Dinosaurios, dedicada a la expedición de 1972 del paleontólogo Giancarlo Ligabue. El museo cuenta con numerosas salas de gran importancia para la historia natural italiana.

Si le apasiona la historia natural, los ecosistemas locales y las especies autóctonas, este museo es una visita obligada.

No olvide que el museo se encuentra dentro de una de las estructuras más bellas de Venecia, el Fondaco dei Turchi. El Fondaco dei Turchi fue construido en 1225 por Giacomo Palmieri. En 1381, el palacio pasó a manos de la República de Venecia y, por su elegancia arquitectónica, sirvió para albergar a príncipes y soberanos. En 1597 fue comprada por Antonio Priuli, quien la alquiló a comerciantes otomanos en 1621. Desde entonces, el palacio fue conocido como Fondaco dei Turchi. Después de la restauración, desde 1898 hasta 1922, fue la sede del Museo Cívico Correr. A partir de 1923, tras el traslado del Museo Correr a San Marcos, el Fondaco dei Turchi se convirtió en la sede permanente del Museo de Historia Natural. La fachada del palacio es de estilo bizantino veneciano con mármol blanco, lo que lo convierte en uno de los palacios más bellos de Venecia.

Una vez terminada la visita al Museo de Historia Natural, le recomendamos que tome algunas fotos de recuerdo de la fachada del Fondaco dei Turchi.